Helios es el dios del sol y la personificación del astro rey en la mitología griega. Es hijo de los titanes Hiperión y Tea, y hermano de Selene y Eos. Aunque Helios es un dios importante, fue más prominente en la religión griega arcaica, pues más tarde su culto fue absorbido por el dios Apolo, quien también se asoció con el sol en periodos posteriores.
Helios participa en varios mitos, y aunque no es tan central como otros dioses, tiene un rol clave en varios relatos.
A pesar de que Helios es un titán por nacimiento, no fue parte de la guerra entre dioses y titanes, lo que le permitió seguir siendo una figura importante en el panteón griego tras la caída de sus congéneres, ejerciendo su dominio sobre el sol.
Si lo prefieres tenemos para ti la historia del dios Helios en video, seguro te encantara, checalo y regalanos un like.
A diferencia de la guerra anterior, Helios si participa en el conflicto épico entre los dioses olímpicos y los gigantes. En algunos relatos, Helios ayuda a los olímpicos, contribuyendo con su luz y poder a la batalla.
El mito de Faetón es uno de los mitos más conocidos que involucran a Helios. Faetón, su hijo mortal, desea probar que es descendiente del dios del sol. Así que pidió a su padre que le concediera una petición. Helios accedió a concederle un deseo, y Faetón pidió conducir el carro del sol por un día.
Helios le dijo montar su carruaje era demasiado peligroso para un mortal, pero Faetón insistió a pesar de las advertencias de su padre sobre los peligros. Sin embargo, al montar el carro, no pudo controlar los poderosos caballos, lo que provocó que el carro del sol se desviara, quemando y congelando partes de la Tierra. Al ver tal desastre, Zeus intervino lanzando un rayo que acabo con Faetón, pero evito que mundo acabara hecho un desastre.
Por su papel como dios del sol, Helios tenía la capacidad de verlo todo desde lo alto. Esto lo convirtió en una figura clave en otros mitos, ya que fue testigo de varios eventos importantes.
Un ejemplo notable es el secuestro de Perséfone. Ya que, Helios vio cómo Hades rapto a Perséfone y la llevo al inframundo. Cuando Deméter, busca respuestas, es Helios quien le revela el paradero de su hija.
En otro mito, Helios también fue testigo, al ver a Afrodita y Ares manteniendo una relación, mientras Hefesto, el esposo de Afrodita, estaba ausente. Helios le contó lo que vio a Hefesto, quien tramo un plan para atrapar a los amantes y exponer su infidelidad ante los otros dioses.
En "La Odisea" de Homero, Helios juega un papel importante. Durante su travesía, Odiseo y sus hombres llegan a la isla de Trinacria, donde pastan los sagrados bueyes del sol, que pertenecen a Helios.
A pesar de las advertencias de Odiseo y de los dioses, los hombres sacrifican y comen a los bueyes sagrados. Helios, enfurecido, pidió a Zeus que castigue a los responsables y como resultado, Zeus envía una tormenta que destruye la nave de Odiseo, fulminando a todos los tripulantes, excepto a Odiseo.
En algunos relatos, Helios es también el padre de Circe, la famosa hechicera de la "Odisea" que transforma a los hombres de Odiseo en cerdos. A quien Helios engendro con la oceánide Perseis.
En resumen, Helios aparece en varios mitos como un dios omnisciente, testigo de eventos clave, y protector.
Helios es generalmente representado como un dios majestuoso y radiante, que personifica el poder y la energía del sol. Su apariencia es juvenil y fuerte, y su cabello dorado. Va montado en el Carro de Solar, tirado por cuatro caballos, que a menudo exhalan fuego o vapor.
Con este carro, Helios viaja a través del cielo cada día, trayendo la luz al mundo. Los caballos son llamados Pirois, Eoo, Aetón y Flegón, nombres que evocan el fuego y la luz del sol.
Como deidad solar, Helios tiene control sobre el sol y la luz. Posee Omnisciencia o visión absoluta. Puede controlar el calor y el fuego. Además, tiene poderes de regeneración, protección y renovación.