Danu es una diosa sumamente prominente en la mitología celta. Es la diosa de los ríos, los lagos, los pozos y se le honraba con ofrendas de agua, tierra o flores. Se le asociaba especialmente con los Tuatha Dé Danann, cuyo nombre significa "Los hijos de Danu". Representa una figura ancestral y matriarcal, vinculada con la fertilidad, la abundancia, los ríos y la creación. Aunque no se conocen muchos detalles específicos sobre Danu debido a la escasez de registros directos, se le atribuye un papel central en la cosmovisión celta.
El nombre Danu está relacionado con las raíces protoindoeuropeas dānu, que significa "río" o "agua corriente". Esto refuerza su conexión con las aguas y la fertilidad.
Danu simboliza la abundancia, la vida y la conexión con la tierra y el agua. En este sentido, es comparable con otras diosas madre de culturas indoeuropeas, como Gaia en la mitología griega.
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Danu no aparece directamente en relatos o mitos detallados como ocurre con otras deidades, sin embargo, su influencia es evidente en las tradiciones relacionadas con los Tuatha Dé Danann, quienes llevan su nombre y son los protagonistas de algunos de los mitos más importantes de la mitología irlandesa.
Los Tuatha Dé Danann son descritos como seres divinos o semi-divinos que llegaron a Irlanda desde otras tierras, trayendo consigo conocimiento, magia y habilidades extraordinarias. Danu es considerada la madre ancestral de esta raza, sin embargo, no se le considera su progenitora física, es más bien vista como una figura ancestral, la fuente de donde proviene su poder y linaje.
Ella representa la fuerza vital que nutre a los Tuatha Dé Danann y les otorga su conexión con el agua, la tierra y la fertilidad, aspectos a los que estos dioses estaban sumamente relacionados. A pesar de esto, según sugieren algunos textos, uno que otro Tuatha De, sí desciende directamente de Danu. Tal es el caso de Dagda, quien a menudo es descrito como su hijo y Lugh, que se dice es su nieto.
Aunque no hay un mito específico que hable de Danu creando el mundo, su asociación con los ríos, la tierra y la fertilidad la sitúa como una diosa madre primordial. Esto la relaciona con el acto de dar vida, tanto a los dioses como a la propia naturaleza.