Alfheim es uno de los nueve reinos del árbol Yggdrasil, es uno de los pocos reinos donde no habitan originalmente los dioses, es conocido como el reino de los Elfos, estos seres son considerados criaturas mágicas y muy poderosas que habitan en completa armonía con la naturaleza.
El reino de Alfheim era compartido por dos razas de Elfos, los Elfos luminosos y los Elfos Oscuros, ambas especies tienen relación la una con la otra pues provienen de los mismos ancestros, compartiendo sangre e historia, sin embargo, los objetivos de ambas razas son muy diferentes.
Los Elfos luminosos adoran la paz y la tranquilidad, gozan de la naturaleza y la belleza, construyen ciudades en los bosques y conviven tranquilamente con la naturaleza, a pesar de ser seres apacibles son poderosos guerreros que incluso pueden combatir con los dioses. Tras una guerra en la que se enfrentaron Elfos luminosos y Elfos Oscuros, los luminosos vencieron y los oscuros expulsados, vencidos y al punto de la extinción fueron desterrados al reino de Svartálfaheim.
A esta tierra acudió el dios de la feracidad Frey tras marcharse de Asgard, pues, el reino de Alfheim necesitaba un gobernante que guiara a los elfos y estos solicitaron a su dios favorito, el hermoso y deslumbrante Frey, el dios de la abundancia acepto y viajo hasta la tierra de los elfos donde fue bien recibido y adorado por su nuevo pueblo.
No existe mucha información del reino de Alfheim, pero, se sabe que en él, la naturaleza esta casi tan intacta como en el mundo de los Vanir Vanaheim, está repleto de árboles e infinitos bosques, ríos y cascadas.