Caronte, conocido como el barquero de los muertos, en la mitología griega. Era quien transportaba las almas de los recién fallecidos a través del río Aqueronte, o, según algunas versiones, a través del Estigia, río que separaba el mundo de los vivos del inframundo, el reino de Hades. Su figura representa el tránsito entre la vida y la muerte, y su labor es un aspecto clave de los rituales funerarios en la antigua Grecia.
Se dice que Caronte solo transportaba las almas de aquellos que podían pagarle. Por eso, para asegurar su pasaje al otro mundo, los griegos colocaban una moneda en el cuerpo durante los ritos funerarios. Aquellos que no podían pagar quedaban atrapados en la orilla del río, vagando eternamente, incapaces de cruzar al otro lado.
Si lo prefieres tenemos para ti la historia de Caronte en video, seguro te encantara, checalo y regalanos un like.
Aunque no es protagonista de ningún mito principal, Caronte aparece en varias historias y obras importantes de la mitología y literatura griega.
En el mito de Orfeo y Eurídice, Orfeo, el músico y poeta, desciende al inframundo para recuperar a su amada Eurídice, quien había muerto prematuramente. Al llegar al río Aqueronte, Orfeo toca su lira y conmueve a Caronte, quien encantado por su melodía decide permitirle cruzar el río para acceder al reino de Hades. Es una de las pocas ocasiones en que Caronte permite que alguien cruce de ida y vuelta, ya que el paso al inframundo solía ser un viaje sin retorno.
Aunque no es un texto de la mitología clásica, La Divina Comedia de Dante presenta una reinterpretación de Caronte, quien aparece en el Canto III del Infierno. En esta obra, Caronte se encarga de llevar a las almas de los condenados a través del río Aqueronte hacia el infierno. Dante representa a Caronte de manera más imponente y terrorífica, con ojos “como carbones encendidos”.
En La Eneida, el poeta romano Virgilio describe a Caronte en detalle durante el viaje de Eneas al inframundo. En este poema épico, Eneas, el héroe troyano, desciende al inframundo y encuentra a Caronte en el río Estigia, reacio a permitirle cruzar. Solo cuando la Sibila, la guía de Eneas, le muestra la rama dorada (un símbolo de protección y permiso divino) le concede el paso.
En uno de los trabajos de Heracles, el héroe debe capturar a Cerbero, el perro guardián del inframundo. Aunque Caronte no tiene un papel activo en este mito, algunas versiones mencionan que le permite a Heracles cruzar el río Aqueronte para que pueda cumplir su misión en el reino de Hades.
Sin embargo, Caronte permite el paso del héroe bajo presión, pues Heracles era un héroe temido incluso entre los dioses. Lamentablemente, Hades lo castiga por haberse dejado intimidar por un mortal. Como castigo, lo encierra durante un año en una celda en el propio Hades, privándolo de su libertad, pero sin apartarlo de su tarea como barquero.
En el mito de Psique y Eros, Psique realiza un viaje al inframundo para cumplir con una tarea de Afrodita. Psique lleva dos monedas, una de las cuales es para pagar a Caronte, lo que le permite cruzar el río y adentrarse en el Hades. Caronte es, en esencia, una figura de transición que acompaña a héroes y almas en sus descensos al inframundo, convirtiéndose en símbolo de lo desconocido y lo ineludible de la muerte.
Caronte suele ser descrito como un anciano hosco, con aspecto sombrío y con una apariencia descuidada. Su figura a menudo es esquelética o fantasmagórica, lo que refuerza su conexión con la muerte. En algunas representaciones, lleva un remo, que usa para guiar su barca en las aguas oscuras del río.