EL dios Nun era la deidad primordial de la mitología egipcia, de el nacieron todas las deidades y la creación. A el se le consideraba como la primera sustancia abstracta, el elemento caótico que contiene todo lo necesario para echar a andar la maquinaria de la creación. Era simbolizado como un infinito mar de indomables aguas primordiales que cubrían todo el universo.
Cuenta el mito que Nun ya estaba presente antes de la creación puesto que el propio dios estaba en un estado indefinido, ya que, existía como concepto pero aun no tenia forma física, pues no había tomado conciencia ni cuerpo. En algún momento espontaneo de Nun surgió la vida pues hizo surgir al Demiurgo pero el dios primordial aun no era consiente de si mismo, no hasta que el Demiurgo le hablo, lo que hizo que Nun despertara e hiciera surgir de si mismo un enorme huevo dorado y brillante en llamas, de su interior nació el dios Ra y junto a el aconteció el primer día de la creación.
Podría decirse que Nun es el dios más poderoso de la mitología egipcia y a la vez no, pues aunque es el contenedor de todas las fuerzas del cosmos es incapaz de utilizar este poder, ya que, el es solo el motor de la vida y aunque si toma conciencia de si mismo no es capaz de manifestarse como un ser.