Hou-Yi (Mitología China)

La leyenda cuenta que en la antigüedad había diez soles que se turnaban para cruzar el cielo uno por uno, estos eran hijos de Di Jun, también conocido como el Emperador Jun y la deidad solar Xihe. Sin embargo, un día decidieron salir todos al mismo tiempo, era tal el calor que emitían que comenzaron a abrazar toda la tierra, quemando las cosechas, evaporando el agua y acabando con la vida de humanos y animales. La supervivencia de la humanidad bajo la luz de los diez soles sería imposible, así que, el mítico rey Yao convoco a Hou Yi para que asistiera a su palacio, una vez ahí, el rey le pidió al poderoso arquero que controlara a los soles.

Hou Yi acudió al monte Kunlun para intentar razonar con los astros, haciéndoles saber el caos que estaban causando en el mundo, pero estos no aceptaron, ignorando los ruegos de los mortales, así que Hou Yi tomo su arco y comenzó a disparar a los soles, derribándoles uno a uno y al caer, estos se convertían en cuervos de tres patas. Cuando solo quedaba un sol en el cielo y Hou Yi estaba a punto de derribarlo, la diosa Xihe se presentó ante el arquero y le rogó por la vida de su hijo, el héroe ya no sabía si debía concluir su misión, entonces Yao asistió a la montaña y le pidió a Yi que permitiera vivir al sol para que ayudara a la humanidad a prosperar.

En otra versión, se cuenta que fue al Emperador Jun a quien el rey Yao convoco para que interviniera y, fue este mismo quien a sabiendas de las fechorías que estaban realizando sus hijos, hizo descender del cielo a Hou Yi, el dios del arco, para que les diera una lección. Di Jun quería que Hou Yi solo asustara a sus hijos, para que culminaran su insubordinación y no volvieran a repetirla, así que, Yi acudió pacíficamente, pero al ver en qué condiciones tenían la tierra los soles, se llenó de furia y se dispuso a castigarles, Hou Yi tomo su arco y derribo a los hijos del Emperador con sus flechas, acabando con sus vidas, cuando estaba a punto de acabar con el último sol Di Jun se presentó ante Yi para detenerlo, pues la muerte de todos los soles dejaría el mundo en las tinieblas.

Por su hazaña, el arquero fue aclamado y adorado por la humanidad, pero al haber arrebatado la vida a nueve de los diez hijos del Emperador Jun se ganó su ira. El Emperador le arrebato su inmortalidad y lo desterró del cielo, sin embargo, a Hou Yi no le importo, pues vivía feliz en compañía de los humanos a quienes siguió protegiendo.

Tras su gesta y ahora como mortal o siéndolo desde un principio, Hou Yi se encargó de diversos seres que amenazaban la vida de los mortales, el primero de ellos fue Fei Lian, señor de los vientos, quien estaba creando tormentas que destruían cultivos y los hogares de la gente. Fei Lian tomaba la apariencia de un enorme toro tuerto y con cola de serpiente, su guarida estaba en el Monte Tai, lugar donde corrió a esconderse cuando se enteró de que Yi lo estaba cazando, el espíritu se adentró en su cueva y se ocultó dentro de un Saco, sin embargo, cuando Hou Yi se adentró en su refugio, se percató de inmediato de la treta del señor del viento, prendió una flecha y la disparo al saco incinerándolo, Fei Lian trato de escapar, pero Yi lo evito, lo obligo a rendirse y a prometer que dejaría de dañar a la humanidad.

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Al continuar su viaje, Hou Yi se encontró con un río que se desbordaba, causando estragos en un poblado, el arquero se percató de que era obra del dios de las aguas, así que, disparo una flecha dentro del río, haciendo emerger a la deidad, quien estaba montado sobre un caballo blanco y rodeado por decenas de guardianes, pero aun así, Hou Yi disparo una vez más desde la lejanía, impactando en uno de los ojos del dios y haciéndolo escapar, incapaz de atacarlo de nuevo, el arquero a punto a otra figura que surgió del agua, pero se detuvo al ver que se trataba de una doncella desarmada, se trataba de Chang E, hija del dios de las aguas.

Al ver a la hermosa Chang E, Hou Yi quedo enamorado de inmediato de ella, comenzó a cortejarla y termino pidiéndole que se convirtiera en su esposa, a lo que termino aceptando, debido a su encanto y al gran respeto que tenía por el héroe. Tras casarse Hou Yi tuvo que encargarse de un grupo de monstruos que causaban terror y muerte, tras eliminarlos recibió el título de Marqués Pacificador. Hou Yi aún tenía un asunto pendiente por resolver antes de volver a casa, pues al ser mortal tarde o temprano moriría y ya no podría ayudar a la humanidad.

Para seguir siendo el defensor de los mortales, busco una solución, acudiendo al palacio de Xi Wang Mu, reina madre de occidente, la diosa conocía perfectamente las hazañas del héroe, por lo que, le regalo el elixir de la inmortalidad, entregándole dos pequeños frascos, pero advirtió a Hou Yi que estos eran los dos últimos de su tipo, Yi pensó en utilizar uno para él y otro para su esposa, así que volvió a casa.

Al llegar a casa, Hou Yi no pudo contar nada a su esposa, pues Yao lo necesitaba urgentemente, así que, guardo los elixires para cuando regresara y salió a atender el llamado del emperador, la misión de Yi duro meses, así que, no pudo regresar a casa, por lo que, su esposa que se encontraba sola y aburrida, por error encontró los frascos y sin saber de qué se trataba los bebió ambos, en ese momento Hou Yi ya estaba de regreso, pero solo volvió para ver como su esposa ascendía al cielo, Chang E había obtenido la inmortalidad, pero a un alto precio, pues ahora debía vivir en la luna.

Tras perder a su amada, Yi se llenó de dolor, lo que lo cambio profundamente, pues se volvió violento y paso de ser un héroe a un tirano. El tiempo paso y en una ocasión uno de sus antiguos alumnos y su favorito, conocido como Feng Meng, que era sumamente hábil con el arco, decidió retar a Yi a una competencia, pero el añejo héroe venció sin esfuerzo y se burló de su antiguo alumno, por lo que, cegado por la ira y los celos Feng Meng decidió acabar con su maestro, aprovechando que nadie se molestaría por su muerte, pues ya no era un héroe digno de honores. Así que un día, en medio de un juego de caza, Feng Meng atacó a Houyi por la espalda matando al legendario arquero y dando un amargo fin a la legendaria vida de HouYi.

En otras versiones Feng Meng es el culpable de que Chang E bebiera el elixir de la inmortalidad, mientras que en otras la culpa fue del mismo Hou Yi, pues al haberse convertido en tirano, Chang E temía que, si se hacía inmortal viviría para siempre atormentando a la humanidad, así que, bebió el elixir para evitar que su esposo lo tomase.

Al arquero legendario Hou Yi se le representa portando su armadura y armamento militar, se le ve cargando su arco hecho con hueso de tigre y tendón de dragón, el cual es su símbolo. Sus dos imágenes más representativas son aquellas donde está atacando los soles con su arco y donde pierde a su amada Chang E.

Como el arquero más legendario de China, Hou Yi posee una puntería prácticamente perfecta, una vez que elige un objetivo no puede fallar. Sus flechas son capaces de quitar la vida a poderosos demonios y monstruos e incluso pueden derribar soles, fueron tantas las proezas que realizo junto a su arco que se le conoce como uno de los más grandes héroes de China.